El Concejo Municipal de Tarija ha aprobado la Ley Municipal de «Fomento a la Energía Solar», una normativa que busca promover el uso de energías limpias en las infraestructuras municipales. Este proyecto, que ha sido trabajado durante más de seis meses, en coordinación con la Universidad Católica Boliviana, tiene como objetivo reducir los gastos energéticos, disminuir la huella de carbono y avanzar hacia un entorno más sostenible. Se estima que, en un plazo de cinco años, el municipio podría ahorrar hasta 2 millones de bolivianos anuales, lo que representa un 30% de su consumo actual.
El concejal Daniel López, principal impulsor de la ley, explicó al diario El País que la iniciativa surge tras un acuerdo entre el Concejo Municipal y la Universidad Católica Boliviana, específicamente con la Facultad de Energías y Medio Ambiente.
Durante el segundo semestre de 2023, un equipo de estudiantes y docentes de la universidad realizó un exhaustivo análisis del consumo energético de más de 300 infraestructuras municipales, entre ellas colegios, hospitales, plazas y parques. Este estudio reveló que el Gobierno Municipal eroga más de 6 millones de bolivianos anuales en pagos por servicios de electricidad.
«Con esta ley, pretendemos hacer más eficiente el gasto energético. A partir de ahora, todas las nuevas construcciones municipales deberán incorporar sistemas de energía solar, lo que no solo permitirá ahorrar recursos, sino también fomentar el uso de energía limpia», señaló López.
La normativa contempla dos acciones clave -destacó- en primer lugar, todas las infraestructuras municipales que se construyan en el futuro deberán contar con paneles solares o tecnologías similares que aprovechen la energía del sol. En segundo lugar, se realizará una evaluación exhaustiva de las infraestructuras existentes para determinar cuáles pueden ser adaptadas a esta nueva matriz energética.
Impacto financiero y ambiental
Según las estimaciones presentadas por la Universidad Católica, la implementación de sistemas de energía solar permitiría que el Municipio de Tarija ahorre alrededor de 2 millones de bolivianos anuales en un plazo de cinco años. Este ahorro representaría aproximadamente el 30% del gasto actual en energía, lo que liberaría recursos para otras necesidades municipales.
Además del beneficio económico, el impacto ambiental es significativo. Al reducir el uso de energía proveniente de fuentes tradicionales, se contribuirá a la disminución de la huella de carbono, promoviendo un entorno más sostenible y limpio para la ciudad.
«De acuerdo a las perspectivas de la Universidad Católica, la inversión inicial que se requiere para implementar estos sistemas podría recuperarse en tan solo tres años, lo que lo convierte en una opción económicamente viable», añadió el concejal.
Experiencias locales de energía solar en Tarija
El concejal de Tarija, Daniel López, también destacó ejemplos de infraestructuras privadas en Tarija que ya han hecho la transición hacia la energía solar, como el Hotel Los Ceibos, la Radio Fides y la propia Universidad Católica Boliviana. Estas instituciones han transformado su matriz energética y actualmente no dependen del Sistema Interconectado Nacional (SIN) para su suministro de energía, lo que ha reducido significativamente sus costos operativos.
La ley fue aprobada por el pleno del Concejo Municipal a fines de septiembre de 2024 y se espera que el alcalde promulgue la norma en las próximas semanas. A partir de la promulgación, el Gobierno Municipal contará con un plazo para evaluar todas sus infraestructuras y determinar cuáles pueden migrar hacia la energía solar.
«El estudio técnico realizado por la Universidad Católica será fundamental para definir qué infraestructuras son aptas para la instalación de sistemas de energía solar. Hay muchas, como colegios y postas de salud, que ya cuentan con las condiciones necesarias, pero otras necesitarán una evaluación más profunda para determinar su viabilidad», explicó López.
Finalmente, el concejal señaló que, aunque el foco inicial está en las infraestructuras municipales, puede ser un ejemplo para el sector privado. Si bien la transición hacia energías limpias en el ámbito privado es opcional, López considera que es una decisión rentable y beneficiosa tanto desde el punto de vista económico como ambiental.
La Ley Municipal de Fomento a la Energía Solar representa un avance importante en el camino hacia una Tarija más sostenible, eficiente y comprometida con el medio ambiente. Se busca crear una expectativa de ahorros considerables y la posibilidad de una ciudad que dependa cada vez más de energías limpias.
Via: El País
